Los códigos de comunicación juveniles
En un estudio realizado por la Fundación Kaiser qye abarcó a 2.000 chicos y adolescentes norteamericanos de entre 8 y 18 años, se observó que pasan cada vez más tiempo usando los nuevos medios-computadoras, internet y videojuegos-, sin que por ello hayan reducido el tiempo que pasan con los medios tradicionales -televisión, medios gráficos y música-. En su conjunto, la cantidad de tiempo que emplean en el uso de los medios supera las 6 horas al día, con lo que su influencia sobre la vida de los chicos no se puede ignorar.
Además, el estudio señala que la cantidad de información y contenidos mediáticos a los que los jóvenes están expuestos también aumentó más de una hora, en los últimos cinco años, de la mano de los videojuegos y las computadoras principalmente. Los chicos usan más de un medio al mismo tiempo -por ejemplo, navegan por internet mientras ven televisión o hablan por teléfono- y, de este modo, incorporan una mayor cantidad de contenidos en la misma cantidad de tiempo. Este es, sin dudas, un fenómeno creciente en el uso de los medios y no sabemos si es bueno o malo, o ambos.
Los chicos pertenecen a la generación que nació con la PC. Las computadoras les brindan un especie de poder sobre la información y una sensación de libertad e instantaneidad. Para ellos, el espacio y el tiempo cobran así otra dimensión.
Los chicos transcurren sus vidas en un mundo que los adultos con frecuencia no comprenden. Y si muchos padres están hoy desconcertados, la escuela media más aún, ya que se enfrenta día a día con un escenario para el que no está preparada: el surgimiento de formas juveniles cada vez más variadas y complejas, inmersas en el mundo tecnológico que les resulta "natural".
Seguramente estos cambios en la adquisicón de información que manejan los jóvenes hará que desarrollen, según la teoría de las inteligencias múltiples, otras habilidades cognitivas, como por ejemplo la espacial o visual.
La escuela parece alejarse de los jóvenes
La evolución de la cultura juvenil no tuvo un impacto fuerte ni en los contenidos ni en la organización institucional de la escuela. La escuela sigue siendo disciplinar, diferencia "materia por materia". La clave está en que la escuela incorpore los elementos centrales de la cultura juvenil y que, al mismo tiempo que cumple con los objetivos respecto de los aprendizajes, tenga en cuenta la pregunta de los propios chicos..."
Artículo publicado por Cecilia Barone cbarone@consudec.org
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2 comentarios:
Querida Silvia.
Creo que seguimos construyendo castillos en el aire, si creemos qu elos que están en otra son los chicos, si seguimos esperando que los padres están "detrás" de nuestro estudiantes, por decirlo de alguna manera.
Creo que como educadores nos debemos aún el debate acerca de qué escuela queremos (y podemos tener), qué eduación creemos que podemos ofrecer... seguimos esperando que los chicos "bajen", "se pongan las pilas", o salimos, como adultos, a su encuentro.
La solución no pasa sólo por llenar de computadoras y herramientas informáticas las escuelas, sino por darle calidad humana, contenido real a las herramientas que tenemos a mano, así sea esta una fotocopia.
No podemos "competir" con pantallas multicolores, ni con soliditos lindos, (a menso que alguien sepa cantar o ejecutar algún instrumento, jaja). Nuestra propuesta debe ser diferente... ¿No estaremos en otra?
Interesante el articulo, pero la realidad de la mayoría de nuestras escuelas y de sus alumnos esta bastante alejada de la de los 2000 jóvenes norteaméricanos citados en el articulo.
Televisión, internet y telefonía celular al mismo tiempo es un problema en aquellas latitudes y en estas latitudes que los chicos lleguen y permanezcan en la escuela es desvelo.
No es oposición a la tecnología ni nada de eso, que no se mal entienda , pero realmente estamos "en otra" nuestra realidad es bastante diferente.
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